martes, 10 de julio de 2012

iorio

estoy en un living muy bonito. hay muchas lámparas armadas con alambres de colores que me recuerdan a esos resortines noventosos con los que uno jugaba y se echaban a perder rápido, todos enredados. En el living estoy con Ricardo Iorio y su amigo-dealer que va a hacer una fiesta en un rato y nos invita. Nos quedamos solos Iorio y yo. entiendo que soy una especie de groupie o similar. El es muy grande, muy fuerte y su voz es la que le conozco: rasposa y profunda. El living de repente está en penumbras y él se me acerca despacio. Y todo es muy dulce, muy suave. Ricardo huele a ropa limpia, a suavizante de ropa. Nos levantamos para irnos -porque este parece ser un sueño apto para todo público- y ya en la calle apretamos en un zaguán y ahí sí el asunto se pone un poco más metalero del conurbano. Finalmente no voy a la fiesta de su dealer, ya es de mañana. Vuelvo a una casa que es la que compartíamos con mi familia en Paternal. La puerta está tapiada. Podría ser una venganza de Iorio por haberlo dejado ir solo a la fiesta de su amigo. Quizás no. La tapia sale facil. Subo a una habitación en un entrepiso y me acuesto a dormir. Sueño, dentro del sueño, que estoy en una casita en un bosque. Hace frío y estoy con G. Aparentemente, los dos sabemos que estamos en un sueño. Hay un arbol enorme en la puerta de la casa y lo abrazo. Sin saber bien por qué, mientras estoy en contacto con el arbol puedo flotar. A lo lejos, unas cabras intentan matar un perro a cornadas.

sábado, 7 de julio de 2012

Z




un nuevo resurgir zombi y yo otra vez sin armas de fuego poderosas para hacerle frente al asunto. toda la calle necochea estaba copada. por alguna razón los zombis estaban vestidos como de gala de casamiento. yo con la bici nomás, esquivando muertosvivos. logro pasar Catalinas, sigo detrás del argerich y todo. Con el corazón en la boca, pero creo que llego tranquila a pasar la autopista y doblar por azopardo. El tema es que hay un pibe, vestido de metalero que intenta hacerse pasar por zombi. "Soy un zombi" me dice. Yo le digo que los zombis no hablan, que deje de perseguirme que no es gracioso.